ALHUCEMAS
10-09-2013
¡Hola, soy Quico Taronjí! Estoy en Alhucemas, ya en la cama para levantarme a las 0700h.
Ayer me casqué 24 horas seguidas navegando solo, con poco viento y siempre en contra.
Cuando pasé las luces del Morro, como aquí le llaman, y vi la bocana del puerto, estuve a punto de entregar mi alma, jajaja.
Me caía de sueño, y aunque sabía que me esperaba todo el trámite de sellar el pasaporte, de contar por enésima vez a los gendarmes mi historia, mi procedencia, que la embarcación no tiene papeles, que navego siempre hacia Oriente… la verdad es que ya me preocupaba poco todo ese jaleo burocrático después de tocar tierra.
Llegué dolorido, con una urticaria rarísima, supongo que del sudor y la sal y los pastelitos de mermelada que me zumbé durante la travesía.
Y tengo una herida en la espalda que parece la mancha de Angola en Google maps… Bueno, en unas horas en pie. Me estoy replanteando la forma de navegar.
He aprendido latín en pocos días. Mañana tengo un día difícil, seguramente otras 24 horas al pie del cañón. Llevo un buen rato planeando la estrategia a seguir para aprovechar bien el viento. Veremos. Sigo rumbo a Melilla..
Os contaré!